¿Qué es un Telémetro?

El telémetro de Leica M no solo es una obra maestra de la mecánica de precisión, sino que, incluso hoy en día, sigue ofreciendo grandes ventajas para la composición fotográfica.
En la actualidad, muchos ya no tienen muy claro qué es una cámara telemétrica, cómo funciona un telémetro, qué ventajas tiene y por qué Leica M sigue apostando por él hasta el día de hoy. Por supuesto, en primer lugar, hay que explicar el telémetro desde el punto de vista histórico, ya que, en teoría, hasta la llegada de las cámaras digitales con Live View, no era posible trabajar sin visor óptico. El telémetro con una sola visión se remonta a Leica M3 de 1954, pero muestra la imagen de una manera que sigue haciendo de Leica M una cámara fascinante incluso hoy en día.
Ventajas del telémetro
Composición fotográfica
El telémetro tiene toda una serie de ventajas frente a otros visores, que casi siempre muestran la imagen a través del objetivo. La ventaja más importante tal vez sea que el visor siempre muestra más de lo que se ve posteriormente en la imagen. En el telémetro, diseñado para distancias focales entre 28 y 135 milímetros, siempre es posible ver las zonas más allá del marco luminoso. Esto ayuda enormemente a elegir la sección de la imagen adecuada, la posición correcta y también la distancia focal adecuada, ya que el telémetro siempre proporciona una gran visibilidad. Con una Leica M, la composición fotográfica es más fácil e intuitiva, lo que constituye una ventaja que diferencia significativamente la experiencia fotográfica con una Leica M.
Precisión
Pero ahí no acaban sus ventajas: la precisión del telémetro es independiente de la distancia focal. Con objetivos de distancia focal normal y, sobre todo, gran angular, el telémetro es mucho más preciso que otros métodos, y solo en el rango teleobjetivo ocurre lo contrario en algunos casos. El telémetro se adapta muy bien a condiciones de poca luz, lo que permite controlar situaciones en las que otros sistemas de enfoque, incluso los automáticos, fallan.

Así Funciona el Telémetro
El telémetro combina dos cosas: por un lado, es un visor óptico que se encarga de seleccionar la sección de la imagen. Para ello, muestra una vista óptica del sujeto y superpone el marco luminoso correspondiente al ángulo de imagen del objetivo. Por otro lado, se encarga de medir la distancia mostrando en el centro de la imagen una segunda imagen parcial que solo coincide cuando el enfoque es correcto.

El telémetro funciona de forma completamente mecánica. La imagen del sujeto se encuadra desde dos puntos diferentes: una de las imágenes parciales proviene del visor óptico y la otra, de una segunda ventana de medición situada un poco más a la derecha. Esta imagen parcial se refleja varias veces mediante un complejo sistema de lentes y prismas para poder superponerse con la imagen del visor con la orientación y el tamaño correctos. El enfoque del objetivo se transmite, a través de la llamada curva guía, a un rodillo en la cámara, donde a su vez gira un espejo. Las dos imágenes parciales y el sujeto forman un triángulo y solo cuando el anillo de distancia está ajustado correctamente, el espejo giratorio garantiza que las imágenes coincidan.
Además, dependiendo del enfoque, la máscara luminosa del marco de distancia focal también se desplaza ligeramente para permitir compensar el eje y garantizar así que el marco siempre muestre la sección de la imagen correcta. En la mayoría de los modelos M, se pueden mostrar marcos luminosos para otras distancias focales mediante un selector de campo de imagen manual. En los modelos analógicos, los marcos luminosos se iluminan mediante una ventana adicional, mientras que en los modelos digitales modernos se iluminan mediante un diodo luminoso.
Datos históricos
Las curvas guía, que transmiten la posición del anillo de distancia del objetivo a la cámara, existían mucho antes de Leica M3, la primera de su clase, presentada en 1954. Estos objetivos con rosca M39, el precursor de la bayoneta M, también se pueden utilizar con un adaptador en los modelos Leica M modernos, lo que supone una continuidad desde los tiempos de las primeras cámaras de sistema sin espejo de Leica, que datan de 1931. Quienes deseen utilizar películas analógicas, necesitarán, por supuesto, un visor óptico. Sin embargo, quienes utilicen una M digital moderna pueden utilizar la función Live View con solo pulsar un botón para ver a través del objetivo y así utilizar en todo momento el visor más adecuado para cada situación. Por ello, muchos objetivos M modernos, como el APO-Summicron-M 1:2/35 ASPH., ofrecen también un rango de enfoque cercano ampliado, ya que el telémetro necesita una distancia mínima de 0,7 metros. Las distancias más cortas se pueden utilizar correctamente en el modo Live View.

Queda por responder la pregunta de por qué el telémetro solo existe en esta forma en Leica, si realmente tiene tantas ventajas. La respuesta es muy sencilla: el telémetro es una obra maestra de la mecánica de precisión, que requiere un proceso de fabricación muy complejo y un ajuste meticuloso, sin lo cual la cámara no podría desarrollar todo su potencial. Leica M se produce en Alemania, en una fábrica artesanal, en gran parte debido a su telémetro, ya que de otro modo no sería posible alcanzar la precisión necesaria.