Fotografía de carrete
El deseo de hacer fotos con carrete, de fotografiar de forma más consciente y dejar atrás las arbitrarias imágenes digitales que inundan los medios de comunicación está experimentando un auténtico renacimiento desde principios de la década de 2020. No solo los fotógrafos que utilizaban carrete en su juventud se emocionan al pensar que ahora pueden volver a hacerlo, sino que una parte importante de la comunidad analógica está formada por nativos digitales cuyos padres ya fotografiaban en digital. Tanto si el motivo de este movimiento es una mirada romántica al pasado, el deseo de frenar el ritmo o simplemente el anhelo de una desintoxicación digital, Leica no solo ofrece cámaras analógicas que reciben una segunda oportunidad de vida con un nuevo propietario, sino que también sigue sacando nuevos modelos.
En primer lugar, tenemos la actual Leica M6 (a partir de 2022), una cámara icónica presentada por primera vez en 1984 y ampliada en 1998 que ha sido considerada, con razón, un hito. Después tenemos la Leica M-A (Typ 127), una cámara puramente mecánica; y la Leica MP, la M analógica extremadamente resistente para el reportaje gráfico cotidiano.
Enfoque, concentración y fotografía consciente, con carrete.
Debido a las propiedades físicas que presenta, hacer fotos con carrete produce una estética muy especial: el grano del rollo de película reproduce la luz, las estructuras y los detalles finos de forma distinta a como lo hacen los píxeles. El hecho de que la gente señale repetidamente que sabe si una fotografía ha sido tomada de forma analógica o digital también puede explicarse por las diferentes formas de hacer las fotos. Alguien que «solo» puede revelar 36 imágenes por rollo fotográfico, en lugar de grabar miles de imágenes en una tarjeta de memoria, por lo general toma las fotografías de forma más consciente. Al no poder comprobar inmediatamente el resultado en la pantalla de la cámara y, si es necesario, reorganizar la sección de la imagen o la composición, se tiende a pensar de otro modo sobre el motivo antes de hacer la foto, y a fotografiar con más conciencia.
Revelar un carrete, ya sea en color o en blanco y negro, no es algo anticuado, retrógrado o de pensamiento retrospectivo: es una decisión deliberada en un momento en que cada fotógrafo puede elegir libremente el medio que desea utilizar. Hace apenas unos años, lo digital había enterrado casi por completo a lo analógico; hoy en día conviven ambos mundos, uno junto al otro, y la diferencia no está en la calidad, sino en el planteamiento y el aspecto estético.
Así utilizan los fotógrafos los productos Leica
Joe Greer compone imágenes de forma artística allá donde va y siente un verdadero amor por la fotografía analógica.
Joe Greer compone imágenes de forma artística allá donde va y siente un verdadero amor por la fotografía analógica.
La clave está en el carrete
Elige el carrete adecuado para tu creatividad.
Carrete de celuloide. El soporte mágico que lleva los originales de los fotógrafos de carrete de todo el mundo. 35 mm de ancho, se debe manejar con cuidado. Para que una imagen tenga el aspecto y las características deseados, es esencial elegir, entre la gama cada vez mayor de carretes, el que mejor se adapte a las necesidades de los fotógrafos. Echar un vistazo a esta breve guía para principiantes puede ayudar a hacer la elección correcta.
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Dominic Nahr: Analog Photography with the Leica M6