A man riding a horse down the street.

En Conversación: Roselena Ramistella y Gianni Berengo Gardin

Leica Gallery de Milán, Roselena Ramistella analiza las obras de Gianni Berengo Gardin en el marco del centenario de Leica. 

El centenario de Leica crea un espacio para el diálogo. Cada mes, una galería diferente abre sus puertas y une a talentos contemporáneos con ganadores del Leica Hall of Fame Award (LHOF). A partir del XX de junio, se darán cita dos talentos italianos: Roselena Ramistella aportará su perspectiva humanista, complementando el trabajo sociodocumental en blanco y negro de Gianni Berengo Gardin. Las obras de ambos talentos crean un espacio para establecer paralelismos e intercambiar ideas.

@Roselena Ramistella

A man has a calf lying on his shoulders high up in the mountains.

100 Años de fotografía de Leica: ¿qué piensas al respecto?

El aniversario de Leica invita a reflexionar sobre el poder de la fotografía como medio de expresión y documentación. No solo celebra una marca, sino que destaca cómo la fotografía ha influido en nuestra comprensión del mundo. En una época dominada por las imágenes digitales, la historia de Leica muestra la fotografía como una forma de arte y como testimonio, capaz de despertar emociones e influir en nuestra percepción de las experiencias humanas.

Gianni Berengo Gardin es uno de los grandes maestros de la fotografía, un verdadero punto de referencia para todas las generaciones.

Para ser honesta, no tengo mentores. Mis experiencias personales y la interacción con otras personas son la base de mi proceso creativo. Me fascina la historia del arte y encuentro mucha inspiración al hojear libros de historia. Tal vez mi mentor es la propia historia, la forma en que los acontecimientos se entrelazan. ”Pero se trata sobre todo de un factor inconsciente: las experiencias que tienes en la vida se combinan con tus lecturas y acaban moldeando tu lenguaje, formando tu propia «marca de belleza».

@Gianni Berengo Gardin

A group of men making fun and they are laughing.

¿Qué similitudes o diferencias se aprecian en este diálogo?

En el diálogo entre mis fotografías y las de Gianni Berengo Gardin se hace evidente el deseo común de explorar la existencia humana en diferentes contextos. Yo expreso este deseo a través del color, que utilizo para extraer la mayor cantidad de información posible de cada escena, mientras que Gardin es un maestro de la fotografía en blanco y negro y se centra en lo esencial. 

Sin embargo, nos une la narración de historias: tanto si se trata de un relato breve vinculado a una sola imagen como de un proyecto a largo plazo, ambos aspiramos a contar historias de una comunidad o de un individuo: rostros, acontecimientos, transformaciones. En nuestro trabajo, la transición es un aspecto estético, pero los contextos históricos y políticos, así como la sociedad, son diferentes. Y, sin embargo, desde el punto de vista emocional, nada cambia. 

¿Cuál de las fotografías de la selección de Gianni Berengo Gardin te gusta más? ¿Puedes describirla brevemente?

La fotografía más icónica de Gianni Berengo Gardin se reconoce al instante. Fue tomada en Gran Bretaña en 1977 y muestra un pequeño coche aparcado frente a un amplio paisaje marino. En el interior del coche hay una pareja que parece absorta en sus pensamientos, mientras el mar de Irlanda se extiende al fondo. Esta imagen evoca la sensación de un momento detenido y suscita innumerables preguntas en el espectador: ¿Están separándose? ¿Son amantes? 

La soledad de ambos protagonistas es perceptible; parecen aislados, desconectados del mundo que los rodea mientras contemplan el mar. La sencillez de la escena se convierte en un poderoso instrumento de reflexión e invita a los espectadores a sumergirse en un universo de emociones e interpretaciones. 

@Roselena Ramistella

Five horses standing on the street.

¿Qué papel desempeñan las galerías en la era de los medios digitales, especialmente para tu trabajo?

Permiten contar historias a través de exposiciones analógicas y generan debates significativos al fomentar la interacción entre los artistas y el público en la realidad. De este modo, las galerías aumentan la visibilidad de la fotografía documental y ayudan a crear una comunidad en torno al arte que genera una mayor concienciación sobre temas sociales y culturales. Incluso en el contexto digital, estas instituciones son decisivas para que se valore la fotografía documental.

Las exposiciones giran en torno a un diálogo visual entre dos generaciones. ¿Cómo te planteaste este tema?

He abordado el tema del diálogo visual entre dos generaciones mediante una comparación directa entre mis fotografías y las de Gianni Berengo Gardin. Quería mostrar cómo nuestras obras, aunque proceden de contextos y épocas diferentes, pueden transmitir emociones e historias similares. 

Nuestro diálogo visual no solo resalta las diferencias estilísticas y temáticas, sino que también invita al público a reflexionar sobre cómo las experiencias y percepciones tienen relación a lo largo del tiempo. 

@Gianni Berengo Gardin

A group of people sitting outside on stairs in front an old house.

¿Cuál es el tema de las fotos presentadas en la exposición?

Mis fotografías abordan temas sociales, culturales y geopolíticos. En Men of Troubled Waters muestro a pescadores sicilianos que rescatan a migrantes durante sus travesías. The Healers retrata a mujeres mayores que curan con oraciones, magia popular y conocimientos curativos tradicionales, una tradición que nunca antes se había documentado. 

Para Deepland, viajé por antiguos caminos de herradura para mostrar la vida de las comunidades rurales en transformación, un proyecto que realizo desde 2016. Mi trabajo entrelaza historias personales con la historia de Sicilia y plantea cuestiones de relevancia global. Para mí, Sicilia es un símbolo de fuerte identidad y demarcación cultural, una «frontera» geográficamente cercana, pero a menudo mentalmente alejada de Europa.

¿De dónde sacas la inspiración?

Mis experiencias personales y la interacción con otras personas son la base de mi trabajo, porque me encanta contar historias con un enfoque humano. Me fascina la historia del arte y encuentro mucha inspiración al hojear libros de historia. Quizá la propia historia sea mi verdadera mentora, la forma en que los acontecimientos se entrelazan. 

Mis estudios de Ciencias Políticas también me han ayudado a desarrollar una visión más amplia de determinados temas. Para mí, la relación con la fotografía y con los temas que trato tiene lugar en un nivel más profundo, a veces difícil de descifrar.

Portrait of Rosalena Ramistella in black and white.

Roselena Ramistella

Nacida en Sicilia en 1982, esta fotógrafa contemporánea italiana centra su trabajo principalmente en aspectos sociales, humanísticos y culturales. Estudió Fotografía y Ciencias de la comunicación y ha trabajado tanto a nivel nacional como internacional. Sus obras se han podido ver en numerosas exposiciones, tanto individuales como colectivas, así como en festivales de fotografía. Además, sus fotografías han aparecido en diversas publicaciones, entre ellas National Geographic, Internazionale y Marie Claire. Su tierra natal es el hilo conductor de todas estas narraciones, que se entrelazan en una historia visual que celebra la riqueza de las experiencias sociales y culturales.

¿Qué cámara utilizaste para fotografiar y por qué?

Ahora mismo estoy trabajando con Leica SL2, que ofrece un rendimiento y una calidad de imagen excelentes. Me acompaña desde hace años y es una especie de joya «sagrada». Para determinados proyectos recurro a Leica Q3. En muchas situaciones, su ligereza y discreción son una ventaja, ya que así puedo capturar momentos auténticos sin parecer invasora.

Portrait of Gianni Berengo Gardin in black and white.

Gianni Berengo Gardin

Nacido el 10 de octubre de 1930 en Santa Margherita Ligure, el fotógrafo comenzó su carrera en la década de 1950, inspirándose en Henri Cartier-Bresson. Centró su trabajo principalmente en la fotografía humanista de estilo reportaje y retrató sobre todo la vida en Italia. Trabajó para revistas de renombre como Il Mondo, L’Espresso y Domus, entre otras. Berengo Gardin trabajó siempre en analógico y en blanco y negro, y publicó más de 250 libros de fotografía a lo largo de su carrera. Hoy en día sigue siendo considerado uno de los fotógrafos más importantes del siglo XX.

En tu opinión, ¿cómo ha cambiado la fotografía en las últimas décadas?

En los últimos diez años, la fotografía ha cambiado mucho. Ahora es más accesible, pero el flujo constante de imágenes en las redes sociales provoca una sobrecarga visual y reduce la fuerza expresiva de muchas fotos. 

La inteligencia artificial plantea retos adicionales con la producción automatizada de imágenes. La fotografía documental tampoco está del todo a salvo: la manipulación puede difuminar la frontera entre la realidad y la ficción. 

Abogo por recuperar la esencia de la fotografía: como análisis consciente y profundo del mundo. Más allá del consumo rápido y lejos del bombardeo visual actual. Es fundamental volver a dar más importancia a los proyectos fotográficos, no solo como documentación, sino también como contribución a una comprensión más profunda del mundo en el que vivimos.

¿Qué oportunidades y retos ves para el futuro de la fotografía?

Desde la perspectiva de una fotógrafa, es imprescindible no caer en el manierismo. Solo a través de la autorreflexión y el perfeccionamiento continuo se puede desarrollar un lenguaje visual propio. Al mismo tiempo, es importante que el trabajo fotográfico se remunere de forma justa y se reconozca como parte integral del arte contemporáneo. Los museos y las instituciones culturales deberían dar más protagonismo a la fotografía, valorar su relevancia artística y dar a los fotógrafos el espacio que se merecen.