¿Cuándo fue la última vez que te enamoraste?
Cada momento es único. Y también lo es cada Leica M11 de este modelo con acabado lacado en negro brillante. Con huellas que cuentan su propia historia a lo largo de los años. La historia de tu Leica. Una cámara que enamora.
Latón con acabado en negro brillante.
Diseño minimalista sin el logotipo rojo de Leica.
Detalles llenos de estilo.
Cada cámara cuenta su propia historia
La Leica M11 presenta un diseño en latón con acabado lacado en negro brillante. Con los años, el uso frecuente deja huellas en el acabado y revela poco a poco el latón que hay debajo. El resultado es una pátina tan única como el pasado de la cámara. La Leica M11 en negro brillante no solo plasma momentos en fotografías excepcionales, sino que también cuenta su propia historia.
Amante de los detalles
Además del acabado lacado, los detalles de diseño cuidadosamente seleccionados resaltan la estética sencilla de este modelo. El acabado en negro brillante de los diales de ajuste y del interruptor de encendido/apagado, así como la renuncia intencionada al punto rojo de Leica, acentúan la sobriedad M por la que las cámaras M son apreciadas en todo el mundo. Además, la cámara incorpora el clásico grabado Leica en la cubierta superior y el disparador cromo plateado brillante, que se utilizó por primera vez en la Leica M3 en esta versión y que recuerda a las históricas cámaras M. Además de todos los detalles de estilo, el elaborado canto en cruz de los diales ISO y de velocidad de obturación hará que no desees soltar nunca esta Leica de tus manos.
Conexión brillante
En combinación con la versión de diseño del Noctilux-M 1:1.2/50 ASPH., la Leica M11 en negro brillante forma una unidad perfecta.