El Arte de los Objetivos Leica M
El Siste M representa la fotografía excepcional, y los Objetivos M son parte esencial de ello. Cada Objetivo M tiene su propia personalidad, al igual que todas las personas que trabajan en ellos.
Peter Karbe representa a la perfección este "elemento humano no cuantificable" en Leica. Él y sus compañeros del departamento de ingeniería óptica son responsables de la evolución del Sistema M y los Objetivos M. Están sentando las bases para que los nuevos Objetivos M se puedan producir con una combinación única de artesanía y alta tecnología. En la sede central de Leica en Wetzlar, nos contó en qué consiste su trabajo.
"Estamos muy orgullosos de lo que nuestros compañeros están creando aquí."
Las propiedades de los Objetivos M son: estructura compacta, intensidad de luz, rendimiento de imagen y resistencia. Cada uno de estos aspectos tiene unos requisitos de diseño específicos. Por tanto, no es fácil mantener el equilibrio entre los cuatro.
“Un Objetivo M es una inversión con futuro."
Todos los objetivos M fabricados a partir del 1954 se pueden combinar con cualquier cámara del Sistema M. Esta mezcla de compatibilidad retroactiva y longevidad significa que los Objetivos M se pueden pasar de generación en generación.
“Esto nos reta a buscar soluciones que antes no existían."
Hacer que un objetivo evolucione significa darle más potencia. Pero, a pesar del mayor rendimiento de imagen, los Objetivos M compactos no deben exceder un cierto tamaño, ya que de lo contrario el sistema dejará de funcionar.
100 AÑOS DE FOTOGRAFÍA LEICA - "36 FOTOS ICÓNICAS"
“La creatividad empieza en la mente.”
Los rápidos objetivos Leica M hacen posible usar la profundidad de campo como una herramienta de diseño especial. El fotográfico aprende cómo acentuar ciertos aspectos, dirigir la mirada del espectador y, así, contar historias sin usar palabras.
"El Sistema M educa a los fotógrafos."
El Sistema M modela la forma en que el fotógrafo ve el mundo. Mejora su fotografía, al igual que una pluma estilográfica mejora su escritura. Incluso a pesar de que el Sistema M puede plantear un reto al principio, después de algún tiempo no querrás volver atrás.