Excelencia Mecánica Pura
Como cámara puramente mecánica, Leica M-A es un instrumento de precisión tan reducido a lo esencial que abre horizontes creativos completamente nuevos para los fotógrafos. Puede que no tenga monitor, fotómetro ni batería, pero lo que sí tiene es una calidad mecánica que hace que los 100 años de experiencia de Leica sean tangibles al instante. Los fotógrafos pueden leer la velocidad de obturación y el diafragma directamente desde la cámara y el objetivo, y así concentrarse plenamente en el sujeto. La firma acústica del disparador de una Leica M-A es una delicia que revela inmediatamente la excelencia de la ingeniería de precisión de su origen.
Completamente fiable
Como una cámara puramente mecánica, Leica M-A es un instrumento de precisión que ha sido reducido a lo básico y que abre por completo un nuevo horizonte creativo para los fotógrafos.
Forma y función
El exterior de Leica M-A es tan atemporal como la ingeniería de precisión que alberga en su interior. Por ejemplo, el punto rojo de leica se ha omitido para enfatizar el estilo clásico y sobrio de su diseño.
Dos acabados diferentes
La cámara está disponible en dos acabados diferentes: la apariencia clásica de la versión en plata cromada continúa con la tradición de diseño que ha identificado a las cámaras Leica-M desde hace 60 años. El grabado de la placa superior de MA plateada refleja su origen, mientras que MA en color negro revela el logotipo de Leica en su zapata.
M es…
Un testigo de la historia, adornado por las manos de leyendas. Un sistema de cámara telemétrica único en su clase. Fascina a fotógrafos y aficionados desde 1954 con su diseño, su calidad Made in Germany y la legendaria marca Leica. Desde la primera cámara hasta hoy. Porque una M es una M y sigue siendo una M.
Forma y funcionalidad en un diseño perfecto
El exterior de la Leica M-A es tan atemporal como la ingeniería de precisión que esconde en su interior. Por ejemplo, el punto rojo Leica se ha omitido deliberadamente para enfatizar la sobriedad clásica de su diseño como máxima expresión de la discreción. Vista de perfil, la M-A es también notablemente más delgada que sus homólogas digitales.
Disponible en plata cromada y negro cromado
La cámara está disponible en dos acabados diferentes: el aspecto clásico de la versión plata cromada continúa la tradición de diseño de los 60 años de cámaras M de Leica. En la opción de negro cromado, la M-A recuerda el estilo de la M Monochrom y sube el listón en cuanto a discreción. Mientras que un grabado en la placa superior de la M-A en plata cromada indica sus orígenes, sólo una mirada más cercana a su homóloga en color negro revela el logotipo de Leica en su zapata para accesorios.
El carrete favorito de las M analógicas: Kodak Tri-X 400
El Sistema M no es la única leyenda fotográfica que celebró su 60 cumpleaños en 2014. El carrete Kodak Tri-X 400 también vio la luz en 1954. Con su excepcional nitidez, grano fino y gradación tonal distintiva, latitud de exposición extremadamente amplia y muy buen detallado de las sombras, esta película en blanco y negro pronto se convirtió en una firme favorita y en un clásico de la fotografía artística y de reportaje. Y también es la compañera perfecta para Leica M-A, lo que explica por qué el carrete Kodak Tri-X 400 se incluye en el embalaje de Leica M-A.
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